El origen del masaje oriental a cuatro manos es de procedencia hindú y posee una antigüedad de más de 2.000 años. En la actualidad se le conoce como masaje a cuatro manos, aunque su nombre original es Diacqua Massage y está inspirado en el "Abhyanga", técnica procedente de la medicina hindú (Ayurveda), que combina eficazmente las técnicas de masaje, música y aromaterapia para conseguir equilibrar el cuerpo y la mente; activando la circulación sanguínea, estimulando el sistema inmune y facilitando el drenaje de exceso de líquido y las toxinas.
He querido aprovechar ésta técnica milenaria para multiplicar los efectos y las sensaciones de toda la amplia carta de masajes. Al ser cuatro manos las que realizan el masaje, los efectos se duplican, intensificando el relax y el erotismo que se experimenta en una sola sesión.
Especialmente recomendado para personas que tienen dificultades para la relajación, personas sometidas a un gran estrés, sobresaturación, nerviosismo, ansiedad, etc. Gracias a la presencia de dos masajistas se hace complicado seguir los movimientos de ambas y finalmente, se consigue una mayor abstracción y concentración , dejandose llevar y disfrutando del relax y la sensualidad del momento.
Un deleite para los sentidos que genera bienestar tanto físico como psíquico.
Con este masaje se consigue mayor capacidad de abstracción al hacerse complicado seguir los movimientos de dos masajistas trabajando simultáneamente. Además, la sensación de bienestar y quietud es mayor que en los masajes sencillos. Todo ello contribuye a que sea más fácil llegar a una relajación profunda.
¿COMO REALIZAMOS EL MASAJE?
Es un masaje llevado por dos bellas masajistas. Dependiendo del tipo de masaje que se elija dentro de la amplia carta masajearemos de forma sincronizada el cuerpo. Cada una situada en un extremo del cuerpo. El cliente totalmente relajado e inundado por un mar de sensaciones sentirá como el placer poco a poco se apodera de él.
Una vez finalizada la parte dorsal del masaje, proseguimos con la parte frontal,
intensificando la presión de nuestras manos y los movimientos sensuales con el cuerpo. mientras, el cliente puede observar y dejarse deleitar por el reflejo de los espejos que les rodean.
Cuando la sensualidad llegue a la cúspide, iniciaremos a cuatro manos el masaje lingam suavemente, coordinadas con el mismo grado de presión combinando movimientos suaves.
Existen dos formas principales de trabajar en el masaje a cuatro manos:
- En espejo: que es cuando los dos profesionales realizan los mismos movimientos entre sí pero de manera contralateral, de tal manera que parezca que se miran en un espejo.
- Asincrónica: es cuando cada profesional realiza movimientos libres en zonas diferentes del cuerpo. Por ejemplo uno podrá estar trabajando en la espalda mientras el otro trabaja las piernas.
Este tipo de masaje es una de las mejores experiencias... Un ritual de sensualidad y de placer indescriptible.
