Incluso tiene otros aromas, los aromas del otoño, que muchos de ellos nos hacen sentir bien.
Disfrutando con un buen te chai caliente es todo un placer...
A menudo pienso que, los pequeños detalles hechos con ilusión son los que nos permiten disfrutar de ésta estación tan especial. Son pequeñeces que dejan una huella en el recuerdo y por tanto en el alma, llenando nuestra mente de una sensación de bienestar y de felicidad...
Es el momento de abrir ventanas, respirar el aire limpio, tirar lo inservible aunque esté pintado de nostalgias, limpiar espacio para abrir hueco a nuevas ilusiones, marcar los límites para que el viento, la lluvia y el frío que vendrán me encuentren preparada.. Así que es el momento de la limpieza compulsiva del interior, ir arrancando sin prisa pero sin pausa lo pegajoso del verano, el tiempo perdido, lo demasiado débil como para soportar otro invierno. Ahí se irán amores y requiebros, algunos sueños que ya no son más que decepción.
Muchas veces me preguntáis como es un masaje y siempre os digo que explicar un masaje es casi imposible, teniendo en cuenta, además, que cada persona es un mundo y que cada masaje, por ende, es irrepetible. No siempre estamos en la misma onda, no siempre venimos con la misma carga emocional o con las mismas necesidades; así que un masaje puede convertirse en una conversación tierna, en una caricia infinita o en un espacio para el desahogo. Lo único que es importante es que os sintáis a gusto y en paz.
IMAGÍNATE UN MASAJE EN ESTA ÉPOCA. . .
Un suave aroma a naranja y a canela embriaga la estancia preparada para tu reposo, que se convierte en un lugar alquímico. Mis manos se deslizan acariciando la tristeza y melancolía para dar paso a la alegría y el bienestar. También mis manos, recorren tu cuerpo suavizando tensiones físicas y rigidez, deshaciendo nudos y bloqueos, transformándolos en expansión y equilibrio. Aceites esenciales específicios, aderezan el masaje aumentando sus propiedades, invitando a que tu respiración sea más óptima y consciente.
Acuno y abrazo tu malestar para que sientas el amor que esconde tras de si...
Es un masaje, que invita a la tranquilidad y al disfrute de uno mismo, en este tiempo de recogida.
Un bálsamo para tus sentidos, un bálsamo para todo tu ser.
Esta es la forma en que te lo puedo explicar en palabras, sin duda, lo mejor es sentirlo. VIVIRLO...
No descuidéis la alimentación, haced deporte, por aquello de regalarnos un extra de endorfinas, y dejaos mimar en un masaje para recargar las pilas. Sois bienvenidos.
Me despido con un tema que por casualidad una tarde una canción destacó sobre el resto. Era ese " Land of eternal sunset", que no dude en volver a escuchar, y en volver a escuchar, y en volver a escuchar... Que a su vez me recordó a aquella puesta de sol increíble y especial que divisé hace unos días. Espero que disfrutéis del tema tanto como yo lo hago.