Me han dado vergüenza las cosas que me han pasado estas últimas semanas.
Ya me decían "te fías de todo el mundo, no cuentes tus cosas, tu historia, tus secretos" La gente se alegra de las desgracias ajenas. De buena aveces tonta.
¿Acaso la vida es estar diariamente luchando?
De verdad que me niego... Eso dice una parte de mí. Pero la otra se revela y hay cosas que no puede dejar pasar.
Más de tres años dedicada al mundo del erotismo, he dedicado tiempo a leer, estudiar, me he informado, viajado, investigado, creado imágenes, practicado, redactado... y JAMAS he copiado a nadie, he podido sacar ideas de unos sitios u otros siempre modificadas adaptadas a mí, pero JAMÁS me he beneficiado de otros.
Y me encuentro con una chica que pasa hace mas o menos un mes por mi sitio con la idea de plagiar, tratar de ensuciar mi nombre y actuar con malas artes. Me encuentro con que de la noche a la mañana se lo estaba montando a mis espaldas. Me siento traicionada por confiar y ayudar a salir de un mundo turbio y oscuro a una pobre chica a la que juega a la ambigüedad. Ojalá hubiera hecho caso de aquel cliente tan sincero que me dijo lo que le pareció.
Me levanto hace una semana y me encuentro con que se ha cambiado el nombre, ha puesto mis mismos servicios e incluso publicitándose con las mismas fotografías realizadas en mi mismo lugar. Y lo que faltaba por ver incluso con mi logotipo.....Vuelvo a remirar por si no lo había visto bien... Si, si, pone lo mismo y son las mismas fotografías que yo misma realice y edite.
Y me pongo a pensar en la cantidad de nombres para llamar a un masaje y la cantidad de descripciones que hay como para que venga ahora una sin un ápice de imaginación y pisotee el tiempo y esfuerzo que le he dedicado.
Hay que tener la poca vergüenza después de todo utilizar las fotografías de mi lugar para intentar lucrarse a costa mía. Ganas me dan de cambiar toda la decoración que con mucho esmero he ido logrando e incluso de tirar a la basura el kimono de flores tan bonito que me compré en su día.
Estoy cabreada y se nota. Por que no me gusta ser vulgar ni mezclar y tener nada que ver con lo que sea así. Porque como os digo yo he recibido una formación como masajista y he pasado luego unas pruebas para ver si era válida o no... y te esfuerzas porque todo salga bien y todo tu trabajo se valore. Y ahí es cuando te cabreas.
Quiero volver a escribir sobre mis temas favoritos y no sobre cosas que me machacan y no merecen la pena. Estos últimos días me habéis dicho cosas muy bonitas, y eso es lo mas importante aquí.
Sola otra vez os espero. Estaré dando guerra a la vuelta de vacaciones en septiembre con muchas mas ganas, anécdotas, novedades y energías renovadas....
Solo necesito volver a encontrarme, dejar en el armario a Samira, desconectar, descansar, tomar nuevos aires, disfrutar....
Os deseo un feliz verano, nos vemos en septiembre... Con muchísimo cariño Sami.
